ANEXOS DE QUIPAN – 1ra parte
Autor: Víctor Delgadillo
Vilcachagua,
(“Quipanerias” 2013; revisado y condensado 2020.)
I.- RESUMEN
En los últimos doce años se ha visto una vorágine por fundar anexos de Quipan que se originó por una convocatoria Comunal y la creciente necesidad de resguardar fronteras lejanas del pueblo. Fue tan rápida la apetencia por suscribir anexos que no hubo tiempo ni oportunidad para perfeccionar una base legal sólida, que garantice la proyección y consecución de metas de los Anexos tanto como de la Comunidad para el mediano y largo plazo. En años anteriores la Comunidad había experimentado la formación de anexos que no prosperaron en el tiempo principalmente por no adecuarse a la legalidad vigente, así como por no diseñar un plan sostenido de desarrollo y actividades.
El propósito de crear
anexos se produce por la necesidad de resguardar fronteras, pero al tratar de
solucionar esa necesidad se van encontrando problemas difíciles y a veces
insuperables en el tiempo. La principal discrepancia tiene que ver con la
actual situación jurisdiccional de la Comunidad de Quipan; las líneas fronterizas
han venido sufriendo variaciones que afectan al territorio de Quipan en las
zonas de Quilca, Callan, hasta cerro San León – Marayneuco. Últimamente la
línea fronteriza con el distrito de Santa Rosa excluye territorios de Quipan
por el margen derecho del rio Chillón.
Otra discrepancia significativa es la falta de sustento jurídico institucional de los Anexos; sin personería jurídica quedan al margen del desarrollo; el accionar se convierte en informalidad. Este año 2020 la pandemia del covid19 que se diseminó a nivel mundial, está marcando un hito desastroso en el accionar institucional y de las personas. Es un hecho que en la Comunidad y en sus Anexos varios comuneros y asociados han muerto y las familias quedaron en la recesión. Son casos no previstos por nadie. Que sea motivo para accionar una urgente recuperación.
Será preciso iniciar
una reconstrucción lenta, y con la experiencia de más de doce años de trabajo
en Anexos comunales, empezar por revisar y actualizar la base legal
institucional, así como la legalidad general de los terrenos comunales.
II.- ANTECEDENTES
Quipan ha tenido en
su historia, algunas experiencias fallidas en cuanto conformar anexos, la
motivación de crearlos siempre fue tener avanzadas en sus fronteras con el fin
de salvaguardarla. La decisión de crear anexos debía partir de la Comunidad
porque las legislaciones así lo facultaban. Durante el siglo pasado se fundaron
los anexos de: Tingo, Tumaringa y el Canovo.
a.- Anexo Tingo (José
Delgadillo,1999)
Tingo se constituyó
inicialmente como “estación” para el accionar del transporte por la nueva
carretera Socos. Después creció bajo la identificación de Caserío o anexo,
efectuando el “reparto” entre algunos comuneros quienes delinearon su local
comunal, plaza, casas, calles y comercios; en los alrededores de la población
se lotizaron chacras y sembríos, así como demarcaron fronteras de gran
extensión de terrenos pastizales. Los más jóvenes Comuneros reclamaron en
Asamblea por no poder “agarrar” en el reparto al cual se resistían los
poseedores de tierras.
Por mayoría acordaron denunciar estos excesos ante el Ministerio de Agricultura, quienes ordenaron una prolija investigación, emitiendo Resolución derogatoria de todos los terrenos tomados. En la investigación del Ministerio de Agricultura se determinó que este proyecto se había efectuado sin ninguna consulta y autorización de la comunidad. El caso se llevó a un dilatado proceso judicial en el Juzgado Provincial de Canta, finalmente en 1942 el Juez de primera instancia dictaminó sentencia a favor de la Comunidad.
Si el proyecto Anexo
Tingo hubiera canalizado por la vía legal, habría conseguido el cumplimiento de
los propósitos comunales: nexo vial importante entre Lima y Quipán; y como
avanzada de vigilancia y defensa de las fronteras por ser lugar estratégico.
Ricardo Bayer (invasor en 1949) jamás hubiera pretendido apropiarse de estas
tierras.
b.- Anexo Tumaringa
(José Delgadillo, 1999)
A mediados del año
1974 la Comunidad de Quipan, bajo la presidencia de don Gumercindo Pascual,
acuerda en salvaguarda, seguridad y vigilancia de sus linderos Macas
– Socos, invitar a los “hijos de Quipan” residentes en Lima, Huaral y otros
lugares para que puedan ocupar espacios de terreno de áreas y tamaño que les
fuera necesario en Tumaringa y el Canovo, y dedicarlo para actividades
pecuarias, sin límite de tiempo y cantidad de personas y en forma gratuita.
El llamado tuvo
acogida, y algunas personas fueron demarcando sus lotes próximos a la
carretera, desde el cementerio de Macas hasta el Canovo, y construyendo
instalaciones para crianza de aves. Fue creciendo el número de avicultores, era
preciso hacer labores y obras comunes, por ejemplo, un puente más consistente sobre
la acequia cerca al cementerio. Iniciándose diversas actividades que se
consolida con la fundación de una “Asociación Avícola Quipan” el 27
abril de 1975 con 25 asociados granjeros, con directiva, reglamento interno y
autonomía de gestión.
También se integraron varios quipaneños que solo se instalaron para usarlos como viviendas. Se instituyó la Cruz de Tumaringa en mayo de 1975 y bajo su advocación hacer la festividad religiosa en fecha 3 de mayo. La Comunidad respaldó a la Asociación, dándole por escrito amplias facultades para el cuidado y vigilancia de esta parte de la frontera de nuestro pueblo.
La labor de la
Asociación se enfocó más en la administración de interés local y comunal,
siendo las acciones más importantes: Se mantuvo buenas relaciones y colaboración
con Macas. Se dilucidó y concilió la línea fronteriza con la Comunidad de
Puruchuco. Con la interdicción de la autoridad provincial de Canta, quedó
aclarado que la línea fronteriza con Santa Rosa de Quives era la gran acequia
que atraviesa por el Canovo.
Las labores de gestión operativas, procesos de crianza avícola, etc., lo realizaba cada granjero por su cuenta y riesgo, atendiendo a su interés y conocimientos sobre el tema. Las variables críticas de la oferta y la demanda de productos avícolas en el año 1976 motivaron el cierre de las granjas y el abandono de las instalaciones; los terrenos se revirtieron a la comunidad. Algunos granjeros valientes se quedaron por su cuenta. La Asociación terminó sus días.
c.- Anexo en El
Canovo
La preocupación de la Comunidad siempre ha sido la vigilancia de sus fronteras. Esto motivó que por los años noventa, también hicieran un amago por crear un anexo en el Canovo: los comuneros lotizaron los terrenos eriazos y en sorteo, a manera de “reparto”, se asignaron a cada uno. El anexo no prosperó, al parecer faltaba un argumento legal, pero sobre todo porque el trabajo que desarrolla el comunero es agrícola y ganadero para lo cual era improductivo el uso de lotes o terrenos eriazos.
(Continuará... )
He leído con interés la descripción de la historia de los Anexos de Quipán. Este es un concepto nuevo para mi.
ResponderEliminarHe podido tener una visión de la formación, necesidad, intentos, esfuerzos, avances y resultados de formar centros de cuidado de fronteras mediante los anexos.
La necesidad de cuidar nuestras fronteras es importante y es real. La ciudad de Lima va creciendo desmesuradamente como es evidente cuando uno viaja por el Chillón y encuentra que las zonas pobladas se van expandiendo mas y mas por lugares que en mi niñez eran tierras libres de construcciones. Parte de este crecimiento bordea con las tierras de los Anexos de Quipán.
Este artículo, mi parecer, presenta una oportunidad y un llamado a que tengamos conciencia de la ubicación ideal de nuestro pueblo en la geografía nacional. Es necesario que las generaciones jóvenes conozcan de esta realidad para que puedan defender la tierra que sus antepasados les dejaron y aquella que ellos, los ahora jóvenes, deben legar a futuras generaciones.
Gracias estimado amigo Víctor Delgadillo Vilcachagua por este artículo, y espero leer los siguientes. Quisiera solicitarte que el mapa volvieses a publicarlo, un poco más claro y amplio, pues hay bastante información que no se puede leer con facilidad.
Un cordial saludo